Guía de Calella de la Costa

Hace poco más de un siglo Calella era un pequeño pueblo de pescadores ubicado a 50 kilómetros de la ciudad de Barcelona. Esta corta distancia, sumado a sus magníficas playas, convirtió en poco tiempo esta población costera en uno de los mejores destinos de Catalunya.

Pero no fueron sólo los barceloneses los que escogieron Calella como lugar de vacaciones, también lo hicieron numerosos viajeros llegados de Reino Unido y de Alemania. Hoy en día, aunque es innegable su atractivo veraniego, estamos ante una localidad costera ideal para disfrutar todo el año.

Y es que el clima mediterráneo resulta bastante suave a lo largo de todas las estaciones, y esta villa marinera posee todo lo necesario para una escapada muy especial, como una gran oferta de restauración y alojamiento, múltiples propuestas de ocio, un gran calendario de fiestas y eventos y todos los servicios e infraestructuras necesarios. Sigue leyendo y lo descubrirás en nuestra Guía de Calella.

Las playas de Calella

• Playa Grande: su nombre lo dice todo, ya que es la de mayor tamaño, contando más de un kilómetro de longitud. Es de arena dorada, y se encuentra junto al Paseo Manuel Puigvert, uno de los centros con más vida de la ciudad de Calella. Este arenal cuenta con servicios de seguridad y vigilancia, incluyendo puesto de la Cruz Roja y Policía Local. También dispone de servicios públicos adaptados para personas con movilidad reducida, como duchas, lavabos y sillas anfibias; tres restaurantes, lavabos y duchas y áreas de fútbol playa, volley playa y baloncesto.
• Playa de Garbí: galardonada con la distinción de la Bandera Azul, esta playa también posee la “Q” de Calidad del Instituto para la Calidad Turística Española. Con 814 metros de largo y 72 metros de ancho, se halla en frente de una zona hotelera, y cuenta con un bonito y animado paseo. Es perfecta tanto para disfrutar tanto en familia como para los aficionados a los deportes náuticos, contando en verano con un montón de actividades organizadas por el Water Sports Centre, incluyendo un parque flotante. Dispone de servicio de vigilancia y de policía, servicios públicos adaptados para personas con movilidad reducida, rampas de acceso, duchas, un chiringuito, carril bici, dos campos de fútbol playa, nueve campos de volley playa y uno de baloncesto.
• Playa de las Rocas: esta playa de 750 metros de largo y 25 de ancho se trata en realidad de cuatro encantadoras calas consecutivas que se encuentran junto a los acantilados de la montaña de Capaspre, que constituye uno de los parajes naturales más bellos de la zona. Además de contar con un entorno privilegiado, esta playa puede presumir también de sus transparentes aguas y de una suave arena tostada. Además de con duchas, este arenal cuenta con zonas nudistas, un restaurante y una pared para hacer escalada.

Qué visitar en Calella

• El Mercadal: llamada actualmente Plaça de l’Ajuntement, en esta plaza se celebraba el mercado semanal en el siglo XIV. Durante muchos años fue la zona donde vivían las familias más destacadas del municipio, además del centro neurálgico de la villa. Hoy en día sigue manteniendo todo su encanto y atractivo.
• Iglesia Arciprestal de Santa María y San Nicolás: es de estilo neoclásico, pero posee unos toques barrocos. Es el caso de su portada barroca, que fue realizada por Jean de Tours, y en ella se pueden ver esculpidas las cabezas de los Doce Apóstoles.
• Can Giol: conocida también como Can o Casa Galceran, se encuentra en la Plaça de l’Ajuntament, y es de estilo gótico y renacentista. Posee unas características muy particulares, incluyendo un molino.
• Casa de los Salvador: también se encuentra en la Plaça de l'Ajuntament, y es del siglo XIV. Se trata de una de las casas más antiguas de Calella, y hoy en día es un edificio municipal abierto al público.
• Can Basart: se construyó en el siglo XVIII, y es de estilo barroco. A pesar de las muchas reformas que ha experimentado a lo largo de los años, mantiene varios elementos originales, como las ventanas de la planta baja o el esgrafiado de la fachada.
• Capilla de Sant Quirze y Santa Julita: edificada en el siglo XV, es ella se combinan los estilos gótico y renacentista. Se encuentra en la calle Francesc Bartrina, y sólo abre al público para celebraciones y conciertos. Si no la pillas abierta, siempre podrás disfrutar y fotografiar su exterior.
• Parque Dalmau: realizado a principios del siglo XX, es un tranquilo espacio natural ideal para relajarse, siendo rico en flora mediterránea.
• Paseo novecentista Manuel Puigvert: en este paseo que discurre junto al mar Mediterráneo destacan los espectaculares plátanos centenarios que lo bordean, siendo uno de los lugares más instagrameables de Calella.
• Parque Natural de Montnegre: se trata de un precioso espacio natural mediterráneo, perfecto para recorrerlo haciendo senderismo o en bicicleta de montaña.
• Faro de Calella: ubicado en un promontorio, a 50 metros sobre el nivel del mar, se remonta al año 1859. Es uno de los lugares más emblemáticos de Calella, y se halla en el mismo lugar donde antaño hubo una torre de vigilancia y defensa que vigilaba y protegía las costas de los piratas argelinos. Por su situación, el Faro de Calella se ha convertido en un magnífico mirador natural sobre la ciudad, el mar Mediterráneo y las montañas del Parque Natural del Montnegre.
• Torretas de telegrafía óptica: son las originales que fueron colocadas entre los años 1849 y 1850, y se encuentran muy cerca del faro. Tenían un uso restringido a las autoridades civiles y militares, y formaban parte de la red de telegrafía óptica de Catalunya.

Hora de comer en Calella

Si decimos que comer en Calella es un placer, nos quedamos cortos. Su cocina mediterránea, sus sabores marineros o su tradición de tapear serán toda una experiencia para nuestro paladar. Tapear es una magnífica costumbre que los calellenses comparten con los visitantes de su precioso municipio, y la lista de bares, tabernas y terrazas para tomar el aperitivo es larga y variada. Un lugar muy especial para tapear es el Mercado Municipal, que se encuentra en la calle de Sant Jaume, 130.

En cuanto a los platos tradicionales, lo primero que hay pedir en esta villa barcelonesa es un buen arroz, y si es junto a la playa, mejor. Hay muchas variedades, y siempre incluyen lo mejor del mar y de la montaña. Pero el ingrediente estrella de la cocina calellense es el pescado, cuyas variedades (gallo de Sant Pere, bastina, lanzones, pargo, dorada, lubina, bacalao...) se preparan según las recetas de las abuelas. Y no olvides darte un buen homenaje con unas ricas gambas a la plancha.

Para los que prefieren la carne, cuentan con platos como los pies de cerdo a la cazuela, el cordero al horno, la ternera con setas o la butifarra a la brasa con frijoles. A ello se une la fantástica experiencia de probar en una típica taberna local un excelente jamón acompañado de un buen vino.

Calella de día, Calella de noche

Sus más de tres kilómetros de playas son uno de los principales alicientes de Calella. Sol y mar siempre acompañados de muchas propuestas de ocio y gastronómicas. Y si no te apetece playa, siempre puedes realizar un peculiar paseo en burro por el Corredor del Montnegre, pasar el día en un parque de aventuras en la montaña, jugar a los bolos o practicar el minigolf. La lista de propuestas es larga...

La mañana y la tarde se pueden aprovechar también para hacer shopping. Y es que esta población catalana es un buen lugar para ir de compras, gracias a sus más de 500 tiendas. Podemos compaginar esta actividad con una visita a la Sala de Exposiciones del Ajuntament Vell o al Museo-Archivo para conocer los orígenes de Calella.

Al caer la noche, en la época estival podremos acudir al cine al aire libre, disfrutar de los conciertos del programa musical “Noches de Verano” o asistir a alguno de los muchos festivales de música y teatro, grupos de habaneras y verbenas que se organizan. También podremos aprovechar la gran oferta de bares de copas, pubs y discotecas con los que cuenta Calella para alargar la marcha hasta la madrugada.

Fiestas y eventos de Calella

• Carnaval del Alt Maresme: el Carnaval se vive en Calella por todo lo alto. Esta fiesta invernal incluye un concurso de comparsas y carrozas donde se premia la originalidad. Durante varios días las calles se llenan de gente disfrazada bailando, un desfile que rezuma y contagia su alegría. Y lo mejor de todo es que aquí el buen tiempo suele acompañar.
• Temporada Lírica Ciudad de Calella: a lo largo de todo el año, las propuestas musicales se reparten por la ciudad. Zarzuela, ópera, piezas sinfónicas con nueva ejecución, jazz.. Y para que esta maravillosa experiencia sea más completa, los conciertos se celebran en lugares tan especiales como el Parque Dalmau o la histórica Sala Mozart.
• Café Jazz de Calella: todos los viernes, de febrero y marzo, se pueden vivir intensas sesiones de jazz en algunos escenarios de la localidad, como el bar de la Sala Mozart, el Sublim, el bar La Gabia o el Surf&Turf. Los protagonistas son tanto artistas de primer nivel como nuevos talentos emergentes.
• Festival Internacional de Orquestas y Corales: se celebra a primero del mes de mayo, y en él participan conjuntos corales de todo el mundo. ¡Y la asistencia es gratuita!
• Momento de Flores: siguiendo la línea del Concurso Exposición de Rosas de Cataluña, a lo largo de dos días, en el mes de mayo, los balcones, patios y jardines de Calella se adornan con profusión de flores. Tanto lugares públicos como privados se abren para que los visitantes disfruten del patrimonio de la ciudad acompañado por una explosión de color y aroma. Se trata de un evento gratuito.
• Feria Renacentista: se celebra en el mes de junio, y con ella se vive y rememora una época de la historia de Calella. Tiene lugar en la Plaza del Ayuntamiento y en la Plaza de la Iglesia, donde se montan puestos y hay exposiciones y demostraciones de artesanía. También disfrutaremos de actuaciones musicales y teatrales y de espacios lúdicos y de ocio, como talleres, juegos infantiles o juegos tradicionales.
• Aplec de la Sardana: se trata de una fiesta dedicada al popular baile tradicional catalán de la sardana. Tiene lugar en el mes de junio, y en ella participan masivamente los calellenses bailándola en el Paseo Manuel Puigvert y en el Parque Dalmau.
• Fiesta Mayor de Sant Quirze y Santa Julita: en el mes de junio, con gigantes, música y bailes, se celebran las fiestas mayores de Calella. Son en honor de Sant Quirze y Santa Julita, y el día grande es el 16 de junio, festividad de la Santa. Es una de las fiestas más populares y participativas de Calella, y unos días antes tiene lugar el Festival Impulso, con numerosos conciertos y espectáculos.
• Verbena de San Juan: la noche del 23 de junio en Calella se llena de rituales y tradiciones relacionadas con el fuego, el gran protagonista. Pero en esta mágica noche también tienen su protagonismo los petardos y las cocas. Con todos estos elementos la población da la bienvenida al verano.
• Otras fiestas y eventos de Calella: las Alfombras del Corpus, en junio; el Festival de Guitarra del Mediterráneo, de junio a octubre; la Verbena de Agosto; el Festival Internacional de Folclore, en agosto; las Nits d'Estiu Calella, de junio a septiembre; la Fiesta Mayor de la Minerva, a finales de septiembre; la Fira de Calella y Alt Maresme, en septiembre; el Oktoberfest, en octubre, o el Encuentro Internacional de Canto Coral "Canta al Mar", en octubre.

Oficina de Turismo de Calella

• Dirección: Sant Jaume, 231. Calella.
• Teléfono: 93 769 05 59.
• Correo electrónico: [email protected]

Horario

• Horario de verano: de lunes a sábado de 09:00 a 13:00 horas y de 16:00 a 19:.00 horas, y domingos y festivos de 09:00 a 14:00 horas.
• Horario de invierno: de lunes a viernes de 09:00 a 13:00 horas y de 15:00 a 18:00 horas.