La Serena: patrimonio, naturaleza y gastronomía en Badajoz

En el noroeste de la provincia de Badajoz, se encuentra este destino en el que se ha conservado un patrimonio arqueológico único en toda Extremadura. El origen de su nombre está, muy probablemente, en el término árabe Serna, cuyo significado es ‘llanura y extensión’, características propias de su paisaje. Se trata de La Serena, que cuenta también con una increíble naturaleza, no en vano tiene la Zona de Conservación de Fauna más extensa de Europa; y unas tradiciones y gastronomías únicas.

La Serena posee una gran extensión de más de 3.000 kilómetros cuadrados en los que, además del importante patrimonio y naturaleza, tiene uno de los ecosistemas más importantes al contar con varias Zonas de Especial Protección para las Aves y otros Lugares de Interés Comunitario dentro de la Red Natura 2000. Todo un lujo para los amantes de la naturaleza.

Qué ver en La Serena

Tartesos, romanos, árabes y castellanos han pasado por la Serena y han dejado su legado en los monumentos y construcciones que todavía hoy se pueden contemplar y nos hablan de todo lo vivido a lo largo de los años en estas localidades. En este recorrido hay monumentos megalíticos, santuarios y termas, pinturas rupestres, castillos, aljibes, palacios, iglesias y ermitas, etc. También tienen la Red de Museos de La Serena, en los que conocer los sabores y la artesanía de esta tierra, así como las Fiestas de Interés Turístico Nacional, o los misterios recogidos en el Centro de Interpretación de Cancho Roano, en Zalamea de La Serena, y en el de Hijovejo, en Quintana de La Serena.

La Serena es un buen destino para realizar diferentes actividades, como los deportes acuáticos en sus más de 200 kilómetros de costa de interior, entre los que destacan la vela, el piragüismo o el baño en las playas naturales. Ofrece asimismo una extensa red de rutas que recorren la comarca, como el Camino Mozárabe de Santiago, los Senderos Locales y los Pequeños Recorridos, aptos para todas las edades y condiciones físicas.

De sus pueblos destaca Villanueva de la Serena por su Capilla del Santo Sepulcro, por el Campanario con la emblemática torre de Nuestra Señora de la Asunción o la Ermita de Nuestra Señora de Piedraescrita. Próximo a este municipio está el Embalse del Paredón, desde donde se puede hacer un camino en el que se encuentran los restos del histórico edificio de La Mata, de los siglos VI a.C. Otros lugares de interés son el Dolmen de Magacela, el castillo de Quintana de la Serena o la Torre de Hijovejo, del siglo II a.C.

Gastronomía de La Serena

Una de las mejores cosas de viajar es deleitar al paladar con la gastronomía local de cada lugar, a la vez que se recuperan energías para continuar con el viaje. Pues bien, La Serena es una comarca llena de sabores y una de las paradas obligatorias aquí sería la Plaza de Calderón de la Barca, donde disfrutar de una buena Torta de la Serena, entre otros manjares.

Pero más allá de estas tortas, de su cocina tradicional o sus dulces, si por algo destaca la comarca es por su queso. Todo tipo de quesos exclusivos de La Serena, cuyo aroma y sabor son muy especiales, ya que se elabora a partir de la leche cruda de las ovejas merinas y que se extrae de las hembras reproductoras. Su exclusividad reside en que de estas ovejas se extrae menos de medio litro de leche al día, mientras que del resto de razas se extrae hasta dos litros.

El proceso de elaboración es totalmente artesanal, incluso para cuajar el queso se utiliza un coagulante natural obtenido del cardo silvestre. Después del tiempo de maduración, en condiciones óptimas y constantes de humedad y temperatura, ya se puede degustar. Por supuesto, es Denominación de Origen Protegida desde 1991, en parte porque esta tradición solo se hereda de padres a hijos, pero también por su alto contenido energético y nutriente, así como por ser fuente de proteína, calcio, magnesio, fósforo, hierro, etc. ¡No puedes dejar de probarlo!