Tres playas de Asturias para disfrutar en solitario
Disfruta con total tranquilidad de tres de las mejores playas de Asturias.
Fuente de la imagen: Playas Calas
El sueño de la mayoría de los viajeros es encontrar una playa o cala solitaria, donde el único sonido sea el de las olas del mar y donde puedas extender tu toalla sin pisar a nadie, y si encima son bonitas, mejor que mejor.
Pues esas playas existen en España, y el norte de España es un buen lugar para encontrarlas. Algunas de las playas más solitarias las encontraremos en el Principado de Asturias. Entre todas, hemos escogido tres. Son preciosas, están rodeadas de naturaleza y son tranquilas, muy tranquilas.
Fuente de la imagen: Minube
La Playa del Silencio, en Cudillero
A 18 kilómetros de la localidad de Cudillero se encuentra la Playa de El Silencio, también llamada de Gaviero. Su nombre le cuadra a la perfección porque, además de ser una de las más bonitas del principado, es un remanso de paz. Se llega a ella desde la población de Castañeras, y tras haber recorrido un maravilloso trayecto de 800 metros.
El premio por la caminata es una cala no muy ancha con 510 metros de longitud. No cuenta con mucha arena, ya que la mayoría son cantos rodados, pero se halla en un maravilloso escenario de grandes acantilados que abrazan la playa, haciendo que las olas del mar entren en ella de manera silenciosa.
Ni en la playa ni en los alrededores hay chiringuitos, ni bares, ni alquileres de hamacas o sombrillas. ¡Ni falta que hace! Este es un pequeño pedazo del paraíso asturiano, que esperemos mantenga su condición de playa tranquila durante mucho tiempo.
Fuente de la imagen: playagulpiyuri.es
La Playa de Gulpiyuri, entre Llanes y Ribadesella
A la Playa de Gulpiyuri se la puede definir como un prodigio de la naturaleza. Situada entre Llanes y Ribadesella, a ella sólo se puede llegar andando desde Naves, que es el pueblo más cercano. Se trata de una pequeña playa de 50 metros de longitud que se forma tras entrar el agua a través de un túnel, dándole el aspecto de una piscina salada.
Está catalogada como monumento natural, y posee varios bufones. Así se llama en Asturias al ruido que hace el agua del mar al pasar a presión por los túneles que hay junto la orilla.
Su peculiar belleza ha adquirido tal fama que son ya muchos los curiosos que, en temporada alta, se acercan a contemplarla, pero el resto del año sigue siendo una solitaria playa de esas que quitan el aliento cuando las contemplas.
Fuente de la imagen: TripAdvisor
La Playa de Barayo, en el concejo de Valdés
Situada en una Reserva Natural Parcial de la Biosfera, la Playa de Barayo no sólo posee un gran valor ecológico, también paisajístico. Está rodeada por dunas, marismas, bosques, acantilados… Lo tiene todo para ser una playa idílica.
Y también es muy tranquila, ya que sólo se puede acceder a este arenal de 650 metros de longitud andando. Se encuentra repartida entre los concejos de Navia y Valdés, siendo el río Barayo la línea divisoria natural.
Aunque no se trata oficialmente de una playa naturista, Barayo cuenta con una zona nudista en la parte oriental de la playa, y los más pequeños disfrutarán de una gran piscina fluvial que se forma, cuando baja la marea, en una zona en la que confluye el estuario del río con el Océano Atlántico.