Descubre los pueblos mágicos de Asturias
Las escapadas más sorprendentes te pueden descubrir algunos de los pueblos mágicos de Asturias. Recuperamos la magia de viajar.
Por toda nuestra geografía encontramos pueblos fabulosos, pueblos especiales, pueblos bonitos, pueblos singulares y hasta tenemos una Red de Pueblos Mágicos. Si te estás preguntando qué es eso de los pueblos mágicos, te lo contamos. Aunque seguro que ya te lo estás imaginando. Son esos pueblos más o menos conocidos, más o menos turísticos que hacen de tu escapada una experiencia mágica.
Y si vas buscando la magia no hay duda que el mejor lugar para encontrarlo es en el mismo paraíso. Hacemos un recorrido por los Pueblos Mágicos de Asturias para que decidas el destino de tu próxima escapada. Tal vez te decidas por Cangas de Onís, tal vez por Castropol o tal vez te apetezca recorrerlos todos. Tú eliges dónde encontrar la magia en tu próxima escapada.
Luarca
A este mágico destino le llaman la villa blanca de la costa verde, pero el despliegue de colores es mayor de lo que te puedas imaginar. Un viaje a un pueblo de pescadores en la zona occidental de Asturias no deja de ser una apuesta segura en cuestión de paisajes, patrimonio y gastronomía.
Te encantará cruzar el Puente del Beso, disfrutar paseando por el barrio pesquero, admirar la grandeza de las casonas de indianos o admirar los retablos barrocos de la iglesia parroquial de Santa Eulalia. Pero sobre todo te va a encantar la magia que se desprende de todos sus rincones.
Cangas de Onís
Es uno de los destinos más buscados en las escapadas a Asturias y con toda la razón. Cangas de Onís es una auténtica fantasía para cualquier viajero amante de la naturaleza y de los paisajes fabulosos. Nada más llegar descubrirás por qué forma parte de la Red de Pueblos Mágicos.
En esta puerta a los Picos de Europa disfrutarás de un entorno natural incomparable, del río Sella, de su Puente Romano, de sus palacios, de sus iglesias, de su ambiente, de su gastronomía y, cómo no, del Santuario de Covadonga y de los Lagos de Covadonga, que suponen una visita imprescindible.
Castropol
La magia de Castropol reside, entre otras cosas, en que lo tiene todo. Como muchas localidades de Asturias, aquí puedes disfrutar de ríos y mares, de montañas y paisajes naturales de ensueño. Y, por supuesto, de patrimonio, de calles pintorescas, de un ambiente animado y de la mejor gastronomía.
El casco histórico de Castropol es una de esas joyas que no te puedes perder, un conjunto fabuloso repleto de casonas de indianos que hablan de tiempos de grandeza. Una grandeza que hoy todavía se puede palpar en el ambiente si haces coincidir tu escapada con la fiesta del Corpus.
San Esteban
En plena ría del Nalón, San Esteban es una de esas joyas asturianas que no son tan conocidas pero que impactan por su paisaje espectacular. En su día fue el primer puerto carbonero de España y sus astilleros hacen las delicias de los amantes del turismo industrial.
Pero es que además posee el encanto de esos pueblos asturianos en los que la arquitectura indiana y los palacios se unen a la naturaleza. En San Esteban comienza una Ruta de Miradores desde la capilla del Espíritu Santo hasta la playa de Aguilar que resulta inolvidable.
Taramundi
Este destino sorprende por alejarse del aspecto de los típicos pueblos asturianos. Taramundi se encuentra en el interior y sigue siendo Asturias, algo de lo que te darás cuenta por su imponente entorno natural. Esos espesos bosques, ríos indomables y praderas de verde resplandeciente solo se pueden encontrar en el paraíso.
Si la naturaleza es la auténtica protagonista en Taramundi, tampoco es que hayan dejado de lado sus tradiciones como comprobarás con la gran cantidad de museos de temática etnográfica que encontrarás por todo el concejo. Y, como en el resto de pueblos, la magia que transmite hará que quieras volver en tu próxima escapada.