Lucainena de las Torres, un pueblo con mucho encanto en Almería
Considerado como uno de “Los Pueblos más Bonitos de España”, Lucainena de las Torres es una joya por descubrir en el interior de la provincia de Almería.
Ubicado en la Sierra Alhamilla, a una altura de 542 metros, es probable que Lucainena de las Torres no sea un municipio tan conocido como otros pueblos costeros de Almería, pero te aseguramos que es un destino inolvidable.
Incluido desde enero de 2013 en la red de “Los Pueblos más Bonitos de España”, se encuentra a 52 kilómetros de la capital provincial, la ciudad de Almería. Merece la pena acercarse a conocer este cuidado pueblo blanco con fachadas siempre floridas, cuya belleza y aroma se funden para convertirse en una experiencia única.
Paseo monumental por Lucainena de las Torres
No te quedes sólo con la belleza de las encaladas y floridas casas de Lucainena de las Torres. Te recomendamos hacer un recorrido monumental por el pueblo visitando lugares como la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de Montesión, original del año 1505, que fue construida sobre una antigua mezquita árabe, pero que actualmente presenta un aspecto neoclásico del siglo XVIII.
La Torre Molinillo de Viento es la única torre vigía que sigue en pie de las siete que había en la villa, y que le concedieron la mitad de su nombre. Está situada en la cima de una roca en una de las colinas que rodean el pueblo. Hace siglos fue restaurada y reconvertida en un molino de viento.
Nuestra visita debe incluir también varias fuentes, el antiguo lavadero, el árbol centenario de la plaza del pueblo o los Hornos de Calcinación, construidos a finales del siglo XIX, que fueron utilizados para calcinar los carbonatos del hierro antes de su comercialización.
Miradores naturales y la Vía Verde de Lucainena
Si quieres contemplar o fotografiar buenas vistas panorámicas del pueblo y de sus alrededores, acércate a alguno de sus miradores, como el del Poyo de la Cruz, situado junto a la iglesia parroquial, o el Mirador del Garruchete.
Y para disfrutar del entorno natural en vivo, apúntate a realizar la Vía Verde que va desde Lucainena a Polopos. Se trata de un trayecto de cinco kilómetros que pasa junto a varios de los antiguos edificios que fueron propiedad de una compañía minera que operó en la zona. Se puede hacer a pie o en bicicleta, siguiendo el trazado de la vieja vía férrea utilizada para transportar el mineral extraído.
Otras dos recomendables excursiones son las del Peñón de Lucainena, que está situado a más de mil metros de altura y es lugar de nacimiento de los manantiales de El Marchal y La Fuente, además de ofrecer magníficas vistas del valle de Lucainena; y el Barranco de Jugarí o de Almanzarilla, donde brota una fuente de aguas sulfurosas que, según se cuenta, es capaz de curar cualquier tipo de dolor.