Berja, en la Alpujarra Almeriense

Situado en la Baja Alpujarra Almeriense, en un gran valle rodeado de montañas y donde abunda el agua, el pueblo de Berja puede presumir de contar con uno de los mejores patrimonios históricos de la provincia de Almería. Ofrece a sus visitantes buenas infraestructuras turísticas, además de contar con un maravilloso entorno natural.

Descubriremos su gran patrimonio arqueológico, y excelentes muestras de monumentos religiosos y civiles, además de poder disfrutar de su envidiable clima mediterráneo. La temperatura media anual se halla entre los 18 y los 20 grados centígrados, y las precipitaciones son escasas, concentrándose en primavera y otoño. Cuenta con particularidades como la ausencia de viento, o que en los meses de invierno haya muchas posibilidades de que nieve en la cercana Sierra de Gádor, pero lo mejor de todo son sus más de 3.000 horas anuales de luz solar.

Y cuando visites Berja, no dejes de pasarte por su Oficina de Turismo, en la calle Agua número 18, porque ofrecen visitas guiadas, e incluso te planifican una que sea a tu medida. ¡No se puede pedir más!

Qué ver en Berja

Paseando por Berja observaremos que una gran parte de sus monumentos son decimonónicos. Es el caso de la Iglesia de la Anunciación, la bonita Plaza Porticada o de varias casas-palacio de la localidad. Dos de estas elegantes viviendas son de propiedad municipal, y se pueden visitar de forma gratuita: el Molino del Perrillo y la actual Casa de la Cultura.

Proseguimos el recorrido monumental visitando el Ayuntamiento, que cuenta con un impresionante Salón de Plenos; la Torre de los Enciso, una construcción militar del siglo XVI, o el Santuario de Nuestra Señora de Gádor Coronada, que se remonta al siglo XVI y está dedicado a una de las Vírgenes más veneradas en Almería.

El agua es omnipresente en Berja, y una buena muestra de ello es la “Ruta de las Fuentes”, un bello recorrido que incluye diferentes fuentes monumentales de los siglos XVIII y XIX y algunos manantiales, y que podemos ampliar visitando el Pantano de Benínar. Y siguiendo con propuestas relacionadas con la naturaleza, a sólo seis kilómetros del centro de la población se halla el Parque Periurbano de Castala, un precioso paraje natural situado al pie de la Sierra de Gádor que es ideal para realizar numerosas actividades, como el senderismo, la escalada o el parapente.

Gastronomía y fiestas de Berja

Llegada la hora de comer, descubriremos que la gastronomía virgitana tiene mucho que ver con la cocina tradicional alpujarreña. Está integrada por platos sencillos, pero ricos y sanos. Anímate a probar las migas con tropezones, las gachas colorás, la sopa de ajo, el choto al ajillo o el cocido de hinojos, entre otras especialidades. Y para postre, date un homenaje con dulces como los pestiños, los buñuelos, las talvinas, el pan de higo, los merengues al horno o el pan de aceite.

Y siempre es un buen plan gastronómico ir de tapas por este pueblo almeriense, porque en sus bares se esmeran para elaborar ricos aperitivos. Por este motivo se celebra la “Ruta de la Tapa, Ciudad de Berja”, que suele tener lugar en el mes noviembre, coincidiendo con la celebración de la ExpoBerja.

Otros eventos señalados son la Feria de Berja, que tiene lugar el primer fin de semana de agosto e incluye una romería al Santuario de la Virgen; las Fiestas Patronales en Honor a la Virgen, en el mes de septiembre, o los Humarrachos, llamada así la noche del 31 de marzo, en la que se encienden hogueras en honor de San Tesifón.