La Villa de Jávea, una joya por descubrir
Jávea es conocida en todo el mundo por sus maravillosas playas y calas, situación que parece descuidar la visita de su casco antiguo. Sin embargo, es una cita totalmente recomendable para descubrir una preciosa villa medieval y perderse por sus calles.
La Iglesia de San Bartolomé
Está situada en el centro del recinto medieval de la Villa de Jávea. El edificio fue declarado Monumento Artístico Nacional el año 1931 por su gran significación histórica y arquitectónica.
Su historia empieza en el siglo XIV cuando fue construido el actual presbiterio, ábside de la gran nave gótica levantada en el siglo XVI por el maestro Domingo de Urteaga. A los lados norte y sur fueron añadidas la sacristía Vella en el siglo XVI, la sacristía Nova en el siglo XVIII y la capilla de la Comunió a mediados del siglo XIX.
El elemento característico de la construcción es la combinación de la función defensiva y el uso religioso, descubierto a través de los matacanes sobre las puertas y otros componentes como su campanario, levantado el 1659, que era utilizado como torre de vigilancia para comunicarse con el sistema defensivo del litoral.
La capilla de Santa Anna del Hospital
Es un pequeño edificio gótico de planta rectangular dividido en tres tramos separados por dos arcos apuntados y cubierta con tres bóvedas de aristas góticas. Está realizado en piedra tosca, en el que destaca un arco de medio punto en su entrada.
Los hospitales de época medieval y moderna no tenían las mismas funciones que los actuales. Se trataba de una institución centrada en la asistencia a los necesitados, más que en la curación de enfermos.
Se conservan pocos datos sobre este Hospital, aunque se sabe que antes de estar ubicado en este lugar, existía un cementerio llamado ‘lo fossar d’Avall’ (Cementerio de Abajo). Sobre el año 1502 el que por aquel entonces era señor feudal de Jávea, Diego de Sandoval, construyó el hospital. De aquel viejo edificio solo se ha conservado la capilla de Santa Anna i Sant Joaquím.
Mercado Municipal de Abastos
Frente a la fachada septentrional de la Iglesia de San Bartolomé se encuentra el Mercado Municipal de Abastos. Fue inaugurado en 1946 y, a pesar de ser una obra moderna, su arquitectura puede enmarcarse estilísticamente en el gótico civil por su inspiración en las atarazanas medievales de Barcelona o Valencia.
Antiguamente, en este solar se encontraba el convento de las Angustias Descalzas, fundado en 1663 por Sor Anna María Gallard. Además de las dependencias de las monjas había una iglesia y un huerto con una torre, en la que reposaba el cuerpo incorrupto de la madre Gallarda, que según cuentan, avisaba dando golpes durante la noche cuando iba a suceder algún hecho importante en el pueblo.
Al margen de las leyendas, hoy en día el mercado es un punto de encuentro para amigos y familias al que ir a comprar productos de primera calidad pero también a degustarlos, ya que cuenta con áreas gastronómicas en las que poder deleitarse.
Las murallas de la Villa de Jávea
La Villa de Jávea estuvo protegida y rodeada de murallas desde principios del siglo XIV hasta que se demolieron en 1874, de las que apenas quedan evidencias.
Los restos aparecidos en la avenida Príncipe de Asturias (en la foto) corresponden al muro y tres contrafuertes que probablemente fueron construidos a principios del siglo XIX, cuando se abrió el Portal Nou (1805) o como consecuencia de la guerra de Napoleón.
Con la intervención arquitectónica para su conservación se ha pretendido consolidar y proteger la obra original, alzando los ornamentos hasta 60 centímetros con el fin de hacerlos más visibles.