Alfaz del Pi, un buen destino en la Costa Blanca

En Alfaz del Pi, o L'Alfás del Pí en valenciano, se hablan muchos idiomas. Y es que a lo largo de la conversión de esta población alicantina en destino turístico de referencia, un proceso que ha durado unas cinco décadas, muchos han sido los extranjeros que han decidido quedarse a vivir en este pueblo de la Costa Blanca. Hoy en día, de sus más de 20.000 habitantes, casi la mitad son extranjeros llegados de más de 50 países diferentes. Estas circunstancias han hecho que el municipio posea una gran variedad no sólo lingüística, también cultural y artística.

Pertenece a la comarca alicantina de la Marina Baja, en la Comunidad Valenciana, y cuenta con un buen tramo de costa por el que se reparten varias playas. De hecho, el pueblo se divide en dos zonas, el casco urbano y la Playa del Albir, el arenal más largo de la villa.

Las playas de Alfaz del Pi

• La Playa del Albir: con medio kilómetro de longitud, este arenal es también conocido como la playa de Raco de l’Albir. Compuesta por cantos rodados y dotada de limpias aguas, es muy tranquila, incluso en verano. El oleaje en la zona es de suave a moderado, y hay un tramo de acceso en el que no cubre, siendo ideal para los más pequeños. La bordea un paseo marítimo repleto de bares, restaurantes y tiendas, y cuenta con buenos servicios e infraestructuras, como alquiler de hamacas y sombrillas, aseos, duchas, lavapiés, pasarelas de madera para personas con movilidad reducida, socorristas, área infantil, máquinas de musculación, alquiler de patinetes con toboganes, castillos hinchables acuáticos o camas elásticas.
• Playa de la Mina: próximas al Faro de Punta Albir hay tres pequeñas, tranquilas y bonitas calas: la Cala de la Mina, la Cala del Amerador y la Cala del Médico. La de la Mina se halla en el entorno protegido del Parque Natural Sierra Helada, y tiene unas medidas de 250 metros de longitud y cuatro metros de ancho. Sólo se puede acceder a ella andando por un camino algo complicado, de ahí que su grado de ocupación sea bajo. Tanto el Puerto de Altea como el Club Náutico se hallan a sólo dos kilómetros de distancia.
• Cala del Amerador: como la cala anterior, su acceso es complicado, y por tanto cuenta con una baja ocupación. Tiene 20 metros de largo por siete metros de ancho, y está compuesta principalmente por rocas, siendo su oleaje moderado. Está ubicada en una zona protegida, junto a una ruta ecológica que lleva al Faro del Albir. Hay riesgo de desprendimientos, pero si hay peligro se encuentra señalizado.
• Cala del Médico: al igual que las dos calas anteriores de Alfaz del Pi, su acceso es difícil, y su ocupación baja. Sus medidas son de 100 metros de largo y cuatro de ancho, estando compuesta por bolos y roca. Al igual que la Cala del Amerador, se halla en zona protegida, y en ella también existe riesgo de desprendimientos, pero cuando hay peligro se señaliza.

Qué ver y hacer en Alfaz del Pi

No todo son playas en Alfas del Pi, también hay otros lugares que visitar, como la Iglesia del Cristo del Buen Acierto, la Punta Bombarda o el Faro del Albir… Si viajamos con niños, o tenemos un espíritu joven y curioso, será una buena idea alojarse en el Parque de Vacaciones Magic Robin Hood Sports, el único resort de Europa de ambiente medieval, con todo lo que ello conlleva.

Los aficionados a la buena gastronomía descubrirán una rica variedad de platos elaborados con arroz, además de unos frescos pescados y mariscos. De esta parte de Alicante son típicas una especie de pelotas hechas con carne y maíz, llamadas de Pilotes de Dacsa, y también las cocas, tanto dulces como saladas.

Si buscamos ambiente festivo, hay que apuntar fechas como las de la festividad de San José, en torno al día 19 de marzo; la Fiesta de la Cruz, en mayo; el Festival del Cine de L'Alfás del Pí, en el mes de julio, o las Fiestas Patronales en honor al Cristo del Buen Acierto, que se celebran en noviembre.