El Castillo de Alcalá del Júcar, en Albacete
En lo más alto de la hermosa localidad de Alcalá del Júcar, en Albacete, se encuentra un gran castillo de origen árabe totalmente restaurado y que puede ser visitado.
Son muchas las cosas que nos llamarán la atención cuando lleguemos al municipio albaceteño de Alcalá del Júcar, ubicado a 56 kilómetros de la ciudad de Albacete. Su arquitectura popular de casas excavadas en la montaña, sus peculiares y empinadas callejuelas o su impresionante entorno natural son algunos de los motivos por los que esta villa castellano-manchega ha sido declarada Conjunto Histórico-Artístico. Y, por supuesto, su castillo.
Ubicado en los más alto del pueblo, a esta fortificación de origen árabe poco le queda ya de su herencia musulmana, ya que ha experimentado diversas reconstrucciones a lo largo de su historia. Construido entre los siglos XII y XIII, este castillo se erigió para ser una fortaleza infranqueable, pero no fue así, ya que el rey Alfonso VIII de Castilla lo conquistó en el año 1213.
Tras ser conquistado, se construyó una iglesia en su interior, y en el siglo XV se le incorporó la Torre del Homenaje, que guarda cierto parecido con la de los castillos de Alarcón, Sax, Villena, Almansa o Chinchilla, entre otros. Entre los años 1964 y 1985 el castillo fue totalmente reconstruido, pasando a contar con salas para exposiciones culturales y una gran variedad de actos. Actualmente puede ser visitado por el público en general.
Las leyendas del Castillo de Alcalá del Júcar
Son dos las leyendas asociadas al Castillo de Alcalá del Júcar, y en ambas la protagonista es la princesa Zulema. En la primera de ellas, Zulema era una princesa cristiana que se enamoró del rey moro Garadén. Como ninguno de los dos quiso renunciar a su fe, y no podían estar juntos, la princesa acabó lanzándose al vacío desde lo alto del castillo gritando: “¡Cristiana yo, o a la tumba fría!”.
Una segunda leyenda ofrece una final más feliz. En ésta, la princesa Zulema era mora, y el enamorado era un caballero cristiano. Como el padre de ella no aceptaba esta relación, los enamorados acabaron huyendo, y se instalaron en una aldea cercana, que hoy en día lleva el nombre de Zulema.
No hay datos reales de ninguno de los dos casos, por este motivo se les considera leyendas, aunque no dejan de dar un interesante toque de misterio al castillo y a esta localidad, que es uno de los pueblos más visitados de la provincia de Albacete.
Datos del Castillo de Alcalá del Júcar
- Horario: el castillo abre de mayo a septiembre, en horario de 11:00 a 14:00 horas y de 17:00 a 20:00 horas. Los meses de octubre hasta abril el horario es de 11:00 a 14:00 y de 15:00 a 18:00 horas.
- Precios: la entrada general cuesta dos euros; los menores de 8 años y los grupos de menos de quince personas pagan 1,50 euros.
- El castillo ofrece exposiciones temporales a lo largo de todo el año.