Ponteceso, en la Costa da Morte de A Coruña

Galicia es siempre un destino sorprendente y muy recomendable, tanto en la zona de costa como tierra adentro. Ponteceso es uno de esos enclaves gallegos que miran al mar, y casi todo aquí tiene relación con el Océano Atlántico, como sus grandes playas o su gastronomía marinera.

Como destino turístico tiene mucho más que ofrecernos, como bellos parajes naturales y un gran patrimonio histórico y monumental. Se halla en la provincia de A Coruña, y a su ayuntamiento pertenecen otras bonitas parroquias, como Anllóns, Brantuas, Cores, Corme Aldea, Corme Porto, Cospindo, A Graña, Langueirón, Nemeño, Niñóns, Pazos, Tallo, Tella y Xornes.

Prepárate para disfrutar a lo grande de los espectaculares paisajes de la Costa da Morte, la cocina marítima y las maravillosas playas de Ponteceso, como la de Niñóns, la Playa de Furna de Osmo, la de Ermida, la Playa Balarés, la Playa A Barra, la Playa de Santa Mariña o la Playa de Morro.

Qué ver en Ponteceso

De la playa nos vamos a conocer el patrimonio monumental de Ponteceso, rico en iglesias, pazos, cruceiros y molinos de agua. Predominan las iglesias de estilo románico, aunque casi todas ellas han sido retocadas a lo largo de los siglos, presentando elementos barrocos y de otros estilos artísticos. No te pierdas la Iglesia de San Martiño de Cores, del siglo XIII; la Iglesia de San Vicenzo, del siglo XVII; la Iglesia de San Adrián, del siglo XVIII; la Iglesia de San Fiz do Anllóns, la Iglesia de San Xián de Brantuas o la Iglesia de Santo Tomé de Nemeño.

Otros lugares que merece la pena conocer son la casa del poeta gallego Eduardo Condal, que no se puede visitar por dentro, pues es una residencia privada, pero que constituye una buena muestra de las tradicionales casas de piedra, con galería exterior de madera y un crucero de piedra en el patio de acceso. En los alrededores se pueden ver las Torres de Mens, el Pazo de Amarelle o el Castro "A Cidade" de Borneiro, más conocido popularmente como la "Ciudad Alta", que data del siglo VI a.c.

Las mejores vistas de toda esta zona de la Costa de la Morte se disfrutan desde el Monte Branco, uno de los puntos más altos del municipio. Contemplaremos vistas panorámicas de Ponteceso, Cabana de Bergantiños, Laxe o la Ensenada da Insúa, donde existen unas gigantescas dunas de casi dos kilómetros de longitud y cuatrocientos metros de anchura.

Gastronomía y fiestas en Ponteceso

Ponteceso cuenta con buenos restaurantes donde darse un homenaje a base de cocina marinera, que se elabora con los productos del mar y de la ría más frescos. Hay un producto estrella en la villa, el percebe de Roncudo, considerado el mejor de toda Galicia. También disponen de excelentes pescados, como congrios, meros y rodaballos. Magníficos son igualmente el pulpo, las nécoras, los berberechos o los bueyes de mar, y en los ríos de la zona se capturan salmones, angulas, truchas y lampreas.

¿Que no te va ni el pescado ni el marisco? No hay problema, porque las carnes gallegas de ternera y de cerdo son impresionantes, y las preparan de diversas maneras. Siempre podrás probar otros platos típicos gallegos, como las empanadas, el lacón con grelos o el cocido gallego.

Uno de los mejores momentos para hacer una escapada a Ponteceso es durante alguno de los grandes eventos que se celebran en el municipio, como la Fiesta del Percebe del Roncudo de Corme, el Festival de Habaneras de Corme, la Conmemoración de las Letras Gallegas o el Ciclo de Teatro de Ponteceso.