Apartamentos Casa Amancio

"Haciendo el camino de Santiago mi tía, mi abuela y yo estuvimos una noche para NO descansar en este establecimiento. Batalla campal contra los mosquitos y las moscas. Balance: 19 picotazos SÓLO EN LA CARA más los del restos del cuerpo y una almohada manchada de sangre que no vi porque me acosté con la luz apagada para evitar atraer a más mosquitos. Ya al llegar al establecimiento nos dio la impresión de que la limpieza no era el fuerte (vi una especie de moco pegado en la colcha y decidí apartarla, también pudimos ver pelos en el baño y bastantes moscas...) Con esto y con todo, lo pasamos por alto por no exagerar y porque, al fin y al cabo, íbamos a alojarnos una sola noche y en cuanto a las moscas estábamos en el campo. Lo inadmisible para mi fue la actitud del dueño del establecimiento frente a lo ocurrido. Por la mañana cuando nos levantamos estábamos las tres llenas del picotazos de mosquito y no habíamos podido descansar por el zumbido de los mosquitos y por haber pasado la noche espantándolos. Lo peor de todo fue cuando vimos la cantidad de picotazos que teníamos por todo el…"